Los romaníes no son nómadas

Difícil de creer, pero es cierto, las poblaciones de romaníes no son nómadas. No, víctimas de persecución desde hace 10 siglos, estas comunidades no hacen más que huir de las represiones y de las leyes discriminatorias en su contra. Si, los romaníes son raramente nómadas, sino los 10 a 12 millones de romaníes no conformarían el 10% de la población en los diferentes países de Europa (10,33% de la población en Bulgaria, 9,59% en Macedonia, 9,17 en Eslovaquia, 8,32 en Rumania, 7,5 en Hungría). Es así como la historiadora Henriette Asséo subraya: “80% de los romaníes europeos no se han movido de sus países respectivos desde hace 2 o 3 siglos”.

En Francia, un informe interministerial de mayo de 2013 precisa que la migración de poblaciones de origen romaní hacia los países de Europa “comenzó a darse hacia los años 90, en el momento en donde la constitución europea tomó una nueva dimensión con el principio de libre circulación de personas y en donde, con el desmantelamiento del antiguo “bloque comunista”, se abren las fronteras al este. El ingreso posterior de algunos de estos países a la Unión Europea no se tradujo necesariamente en movimientos masivos de personas. En Francia, los romaníes son alrededor de 20 000.

Dios sabe – si Él existe – que yo no tengo nada en contra del nomadismo, al contrario, pero el pensamiento dominante de  nuestras sociedades modernas rechaza toda forma de nomadismo y todo lo que se le parezca. Más bien, cuando alguien quiere matar su perro, decimos que es porque tiene la rabia, aquí para discriminar una población, decimos que esta es nómada y que no quiere “integrarse”, adoptar nuestras leyes, someterse a nuestro estilo de vida. Las poblaciones romaníes son vistas como insumisas, cuando no es el caso de tratarlas como “asociales”. En 1954, un fallo de la Corte Constitucional de Karlsruhe (en Alemania) afirmaba que “los romaníes habían sido deportados por asociales y no por cuestiones raciales”, ¡así como lo escuchan! ¿Asociales? Y eso perdura entre la amnesia y la injusticia. Si ellos “tuvieron el derecho” de ser víctimas en los campos de concentración nazi (entre 250 000 y 500 000 personas fueron asesinadas según la Asociación Romani Phuu), ellos han carecido de derechos al no ser defendidos en el proceso Nuremberg. El reconocimiento del genocidio no se dio que hasta principio de los años 80.

Caricatura e intolerancia a todo nivel

Como con todas las formas de discriminación, primero está la ignorancia y muchas veces el desprecio. Yo estaba convencido que estas poblaciones eran todas católicas, Algunos son bautizados como ortodoxos y sepultados como musulmanes. Los romaníes no son criminales por naturaleza, ladronzuelos o yo que sé. Para el alcalde de extrema derecha de la ciudad de Gyöngyöspata (en Hungría), Oszkar Juhasz: “La criminalidad romaní se puede explicar científicamente. (…) Si los gitanos crían caballos, no es por amor a estos animales, sino para deshacerse de los cuerpos de las personas que ellos matan”, ¡ridículo! Como lo dice un informe firmado por el senador Michel Billout, cada quién hace su propia caricatura de la situación de los romaníes, de su tolerancia o su intolerancia. Es justo aclarar que no hay suficientes  datos que permitan concluir una más arraigada criminalidad entre las comunidades de romaníes que entre las comunidades que no lo son. En Francia por ejemplo, no existe ninguna información o dato de carácter étnico, sin embargo los medios de comunicación no vacilan en hacer amalgamas y lo  peor, nunca son contradichos por los poderes públicos o los responsables políticos”. Caricatura e intolerancia a todo nivel.

Considerando su situación vulnerable en términos de exclusión, de discriminación y de pobreza, un informe de 2011 del Centro Europeo de los Derechos de los Romaníes y la ONG People in need llamado “Breaking the silence”, nos muestra que los romaníes son las grandes víctimas de la trata de personas. Sí, es necesario insistir a aquellas almas envenenadas por el “discurso de Grenoble” del presidente Sarkozy, que la trata de personas no es una “práctica cultural” entre los romaníes. Necesitaremos tiempo para encontrar las vacunas eficaces. Tony Gatlif ha realizado películas que conmueven el espíritu y cambian los estereotipos, un buen ejemplo Liberté (Libertad), una película que se desarrolla en la Francia de Vichy de 1943. Luego la jornada internacional de los romaníes el 8 de abril y ¿cuándo un museo de Historia dedicado a las poblaciones romaníes?

“Los medios de comunicación no vacilan en hacer amalgamas y lo  peor, nunca son contradichos por los poderes públicos o los responsables políticos”.

Dolpi